Al principio,
hubo que aprender a separar
tu piel de la mía.
Tus ojos, lo suficientemente cansados para cerrarse
supieron dar un último paso
y entregarse
a la lucha
a la vida
al amor.
Luego
tuvimos que aprender a separar tus problemas
de los míos.
Nuestras diferencias comenzaron a notarse
y me vi
en la arena,
en la tormenta,
en la línea de fuego,
luchando conmigo
y contigo y con todos
para salvaguardar tu sonrisa.
Ahora,
tenemos que aprender a alejar tu vida
de la mía.
A veces,
el amor no es suficiente.
20 de Septiembre del 2011
Me encanta...
ResponderEliminarMe gustan demasiado muchos de los tus textos!